
La fugacidad de la vida viene mostrándonos cada día lo poco que hacemos con ella y lo mucho que le exigimos. Pero la vida es mucho más que todo eso. Es el principio de todo camino en el que nos hallemos inmersos. Cada paso y cada ilusión son nuestros bastones para sugetarnos frente a los retos y las dudas. Como el arco que propicia la tensión idónea para que la flecha vaya directamente donde nos proponemos. Punto de partida que desde ahora ya vemos a lo y que tenemos que colocarnos en él para iniciar el camino. 2022 llega con pasos de gigante y todavía nos encontramos en la estrecha sombra de esa duda que ni por un momento debemos cuestionarnos a la hora de avanzar ese paso al frente y ser capaces de conquistar una senda nueva con unos proyectos nuevos. Nada es imposible si realmente creemos en nosotros mismos.