«La palabra puede transformar la realidad, pero es el silencio lo que nos transforma a nosotros mismos» (Pablo D´Ors) Existe ese faro en medio del jardín y parece que ya casi nadie lo ve. ¿Socios o sabuesos? Buscamos la verdad en lugares equivocados e intentamos imponernos haciendo doblegar siempre al más débil. En la política y fuera de ella existen razones para ir siempre buscando esos vericuetos por los que siempre nos empeñamos en pasar, después vienen las lamentaciones, cuando ya no hay remedio. La política es el arte de buscar problemas, encontrarlos, hacer un diagnóstico falso y aplicar después remedios equivocados. Y en ese ir y venir de conclusiones inconclusas nunca sabemos si vamos o si venimos. Si crecemos o si se nos comen los impuestos. Aquí nadie reconoce nada o no se dieron cuenta de ello. Como bien sabemos, la literatura es el arte de escribir algo que se lee dos veces y el periodismo el de escribir algo que se lee una vez, me decanto en decir que hay que hacer algo, pero no pensar en hacer algo y en el fondo un poema es no es más que sea la luz que nos permite ver. Y creer posible algo es hacerlo cierto. Descubrir en ese estado de conciencia desde el que saberse completo en lo más profundo de uno mismo, es lo que hace prender la luz de ese faro en el jardín de la vida.