A veces tenemos la sensación de estar mirando algo pero no lo vemos. Tantas son las cosas que se nos pasan desapercibidas que hasta podríamos llenar un bloc de notas con las innumerables visiones que a lo largo del día se cruzan frente a nosotros. «La habilidad de observar sin evaluar es la forma más alta de inteligencia» (Krishnamurti), por eso nos sentimos perdidos en un mundo de conocidos sin saber donde nos llevan nuestros pasos o nos conducen nuestras intuiciones. Hoy me encuentro frente a esta estampa y veo dos palomas que toman el sol sobre una cúpula blanca. Cielo azul y una palmera que resume entre la brisa ese fotograma creado por la circunstancia pero con todo el contenido de su mensaje. La simplicidad es la última sofisticación y en esta vida «imperfecta» a la que todos estamos invitados observamos que ésta es como la fotografía. Nos desarrollamos siempre desde lo negativo. Solamente hay que colocar bien el objetivo para ver toda su belleza.