La más grande oportunidad del siglo XXI para el hombre. Quizás todavía estemos a muchos años luz de crear conciencia sobre el medioambiente pero es una razón que urge si queremos pronosticar un diagnóstico favorable para la Tierra. Seguimos matando buenos árboles para hacer malos periódicos. Convertimos el mar en el vertedero de plástico más dañino del planeta. Vivimos como sí tuviésemos otra tierra a donde ir y nos engañamos constantemente porque no va a vivir mucho más tiempo como el cautivo de la humanidad. En ese estado de autonomía que debemos crear entre el hombre y la tierra cae la de vida para el medioambiente y también para los humanos. Desde la rana que jamás se beberá el estanque donde habita hasta el ave que procura mantener la rama fresca y viva en el árbol para seguir creando su nido cada año. Nuestro progreso se está midiendo por la velocidad con la que estamos destruyendo las condiciones que sustentan la vida en el planeta.
«La fe en el planeta es el tema más importante al que se enfrenta la Humanidad»