«El valor es… el conocimiento de cómo a temer lo que debe ser temido y como no temer lo que no debe ser temido» La función de la inteligencia debe ser creadora. Nadie debe conformarse con la subsistencia de una forma social. El valor va mucho más allá de todo ello. No conocemos la verdadera fuerza de nuestro valor hasta que ésta nos pone a prueba. Los convencionalismos son como esporas que se abren junto a nosotros tratando de distraer nuestras decisiones y haciéndonos adquirir miedo y confusión. Se dice que lo mejor de la música no puede hallarse en las notas sino mucho más allá de lo que percibimos en nuestros oídos. El va lo es como una sinfonía en la que todo está presente aunque no lo veamos. Cuando nos enfrentamos a ese reto al que solamente con valor estamos dispuestos a asumir se despliega en nosotros lo que siempre estuvo. Y esa es la respuesta de que «Mi tiempo llegará»