
Suena el shofar y con el se anuncia la llegada de un nuevo año para el pueblo de Israel. No habrá fiesta en las calles y tampoco las familias podrán reunirse como siempre, pero en el deso de un buen año nuevo confiamos que para el próximo la alegría llegue a sus sinagogas, sus plazas y todo aquello que enmarca la idiosincrasia de un pueblo que a pesar de todo sabe seguir adelante. Buenas fiestas.