Bajo el lema «Uniendo nuestras voces para la conservación de las aves» celebramos este año el Día Mundial de las mismas. A esos viajeros estacionales que surcan los cielos en busca de alimento o mejores condiciones climatológicas dedicamos estos minutos. Cuando las vemos cruzar bajo cielo nos contagian de esa libertad, de ese flujo de aire fresco y nos hace concienciarnos de su metodología natural por la supervivencia. La primera migración de la que se hace referencia data de más de tres mil años, mencionadas éstas por Homero y Aristóteles. La Biblia también hace mención en el Libro de Job con estas palabras «Es por tu inteligencia que se cubre de plumas el halcón y despliega sus alas hacia el sur»
Con su instinto cada año resurgen frente a nuestros ojos. Nos dan una lección de vida porque la vida no es esperar a que pase la tormenta sino aprender a bailar bajo la lluvia.