De las manos de una artesana tinerfeña singular nacieron estos sueños retenidos en el tiempo. A pesar de los años transcurridos el color no falta en sus ilusiones y la fantasía y minuciosidad de sus trabajos re recopilan en una casa llena de risas, fotos, cuadros y recuerdos, muchos recuerdos. De un armario de cocina nació en el año 1999 esta preciosa casa de muñecas donde sus habitantes acompañan sus horas y sus días. Desde distintos lugares de España llegaron hasta sus manos muñecas centenarias enfermas, desnudas y triste. Con su hábil caricia le ha ido devolviendo una nueva vida. No hay nada más bello en el mundo que tener un corazón siempre abierto a la sabia inocencia de las cosas sencillas. Sin recodos y sin muecas, tal y como son porque de los más descuidado se puede llegar a formar algo extraordinario. Las estancias de esa bonita casa de muñecas duermen tras las ventanas y aún así nos contagian de esa hermosura transparencia de lo natural. Casa diseñada y realizada por María Teresa Ll. R.
Reportaje gráfico de Hanah Valentín.